Vendido
Esta finca, construida en 1900, y renovada recientemente preservando varios detalles originales, se halla situada entre la encantadora ciudad de Sóller y su puerto. El histórico tren de madera de 1913 le llevará tanto a la ciudad, como al Port de Sóller y sus playas en cuestión de minutos. La propiedad tiene sol todo el año, y ofrece unas vistas maravillosas de las montañas. La finca incluye un jardín de 900 m2, con una piscina, y tiene la gran ventaja de obtener agua potable de una fuente. Además, la casa tiene calefacción de gasóleo, aire acondicionado en dos habitaciones, un sótano perfecto como bodega, un parking privado y una caseta en el jardín para las herramientas y el gasóleo.